Se necesita un sistema bancario más integrado para apuntalar la recuperación y restablecer la confianza

Superar las deficiencias estructurales es un objetivo esencial para lograr la recuperación a largo plazo

Es imprescindible respaldar la demanda hasta que se adopten medidas a nivel más global

Si bien se han adoptado importantes medidas colectivas para hacer frente a la crisis en la zona del euro, es preciso aplicar nuevas medidas de política para respaldar el crecimiento y fomentar la creación de empleo.

En su última evaluación anual de la zona del euro, el FMI señala que estas medidas, si se adoptan de manera coordinada, se reforzarían mutuamente.

“En el último año, se han adoptado importantes medidas a nivel nacional y de la zona del euro para combatir la crisis”, afirmó la Directora Gerente del FMI, Christine Lagarde. “Sin embargo, a pesar de estos avances, la recuperación económica sigue siendo incierta, el desempleo continúa aumentando y el nivel de incertidumbre es elevado. Es preciso adoptar medidas de política adicionales para restablecer plenamente la confianza, reactivar el crecimiento y crear empleo”.

En particular, el FMI hizo hincapié en la aplicación de medidas orientadas a sanear los balances de los bancos, completar la unión bancaria, respaldar la demanda y avanzar en la implementación de reformas estructurales.

Avances hasta la fecha

El FMI reconoció el impacto positivo de las medidas adoptadas en el último año para combatir la crisis, como la implementación del marco de las Operaciones Monetarias de Compraventa del BCE, la creación del cortafuegos denominado Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y los acuerdos sobre los países que aplican un programa. Estas medidas han abordado las amenazas inmediatas, pero los mercados financieros siguen estando fragmentados en función de las fronteras nacionales.

Además, dados la persistente incertidumbre y los altos niveles de deuda, los hogares y las empresas están aplazando sus decisiones de gasto. En vista de los niveles sin precedentes de desempleo, especialmente entre los jóvenes, los riesgos de estancamiento y de que el crecimiento potencial sufra un daño a largo plazo han aumentado.

Cuatro ámbitos prioritarios

Por lo tanto, en la evaluación del FMI se recomienda centrar la aplicación de políticas en cuatro ámbitos prioritarios:

• Sanear los balances de los bancos. Para generar mayor confianza, es necesario presentar una evaluación creíble de la calidad de los activos de los bancos. Esta evaluación permitiría cuantificar los requerimientos de capital y debería incluir un plan en el que se indique claramente cómo cumplir estos requerimientos. Cuando el capital privado no sea suficiente, será esencial garantizar un apoyo financiero creíble —en algunos casos, a través del MEDE— a fin de preservar la capacidad de los bancos para seguir otorgando préstamos.

• Completar la unión bancaria. Esto implicará acelerar las reformas que ya están en marcha, como la promulgación de legislación sobre el mecanismo de supervisión único y el acuerdo definitivo sobre la directiva de recuperación y resolución bancaria. También debería abarcar la introducción de un sólido mecanismo de resolución único que garantice la rápida resolución de los bancos, limitando los costos para los contribuyentes.

• Adoptar nuevas medidas para respaldar la demanda a corto plazo. El FMI manifestó su apoyo a favor de la reciente introducción de directrices prospectivas y del compromiso del BCE de mantener una orientación acomodaticia de la política monetaria durante todo el tiempo que sea necesario. El FMI también señaló que si bien la política monetaria no puede por sí sola abordar las deficiencias estructurales del sector bancario, puede proporcionar un espacio esencial, mediante la aplicación de medidas convencionales y no convencionales adicionales, según sea necesario. Además, el ajuste fiscal en los países de la zona del euro debería avanzar a un ritmo gradual para evitar que no afecte excesivamente al crecimiento.

• Avanzar en la implementación de reformas estructurales. Es necesario abordar las deficiencias estructurales —a nivel nacional y de la zona del euro— a fin de elevar el potencial de crecimiento y fomentar el ajuste externo dentro de la zona del euro. La implementación de la directiva de servicios ayudaría a reforzar la competencia y la productividad, mientras que la adopción de reformas del mercado de trabajo a nivel nacional fomentaría la competitividad y la creación de empleo.

Ventajas de la aplicación de políticas

En la evaluación del FMI en el marco del Artículo IV también se señala que las ventajas de la aplicación de reformas integrales —abordando la fragmentación financiera y las deficiencias estructurales— podrían ser significativas a mediano plazo, lo que podría elevar el nivel del producto mundial y el de la zona del euro en alrededor de 3% y 1%, respectivamente, en cinco años.

La evaluación del FMI se basó en las conclusiones preliminares del informe elaborado por el personal técnico del FMI que visitó la zona del euro. Se dará a conocer el informe definitivo una vez que sea debatido por los 24 miembros del Directorio Ejecutivo del FMI en las próximas semanas.

Fuente: FMI